8/10
Aún recuerdo la primera vez que
Caligula cayó ante mis ojos, tenía unos catorce años y decidí ojearla sin mucha idea de en qué me estaba metiendo, una vez al lío, no salí de la estupefacción y el asombro durante unos 156 minutos de horror, orgías, sangre y blasfemias. Una película que quedaría marcada a fuego en mi mente para, unos años más tarde, volver de la memoria y hacerme ver que el film en cuestión emana puro
Doom a cada minuto que pasa. Está claro que los chicos de
Fangs of the Molossus comparten opinión y es que una banda cuyo corte de presentación es un homenaje a semejante película merece una escucha como mínimo.
A pesar de la poca longevidad de la formación (empiezan su andadura sobre 2011), los chicos de
Fangs of the Molossus cuentan con una gran experiencia individual. Desde el
garage rock al más puro
jazz, estos músicos deciden emprender un extraño experimento cuyos únicos puntos en común son la pasión por la lentitud y la crudeza en el sonido. Quinteto procedente del norte de Italia que nos hace llegar su debut homónimo dividido en cinco cortes que proponen un
Doom Metal oscuro, potente y psicodélico, en la onda de bandas tipo
Electric Wizard,
Hawkwind,
Cathedral,
Ufomammut o
Saint Vitus. Cortesía de
Zoltan Records y
No Shoes Records.
Una vez comienza la escucha, lo primero que nos llama la atención es el peso de la atmósfera, un trabajo mayormente instrumental cargado de largos y poderosos puentes que saben desarrollar sin caer del todo en la monotonía, de esos que nos van poniendo en situación a medida que se intensifican para luego estallar con un
riffazo potente y ametrallador. Paisajes muy bien definidos, una estructura con cuerpo y bien ejecutada y una sonoridad sin demasiadas pretensiones ni complicaciones. Estos chicos se limitan a dejar fluir su capacidad compositiva y a ver qué sale. Temas como el primer corte
Caligula o el gran
I Drink Your Blood son una prueba de que los resultados hablan por sí solos, estamos ante otro activo que da el salto a la profesionalidad y se une a la relevante escena italiana.
Bien es cierto que no estamos ante la banda más original ni más reveladora del año pero estos chicos acaban de lanzar un debut muy respetable y competente de esos que mejoran con las escuchas. Una obra que se limita a sonar de puta madre y a ofrecer un excelente tributo a los severos dioses del
Doom, sólo para el deleite de aquellos que estén dispuestos a disfrutar de una joya
underground como ésta.
Reseñado por mordrake, original de The Gate of Doom.